El litio y sus derivados se extraen de las salmueras del salar de Atacama. Sabemos que las salinas son ecosistemas frágiles y por eso actuamos de manera tal que causemos el menor impacto posible en ellas. Nuestra operación se basa en una gestión sostenible utilizando los más altos estándares y mirando hacia el futuro, entendiendo que se trata de un ecosistema sensible. También contamos con protocolos de acción que respetan la flora y la fauna nativas y nuestra intervención tiene en cuenta un horizonte a mediano y largo plazo.
Las inmejorables condiciones ambientales del norte de Chile, con un clima estable sin presencia de lluvias y alta radiación solar, permiten que el proceso de concentración de litio se realice de manera natural a través de la evaporación, sin necesidad de incorporar químicos u otros agentes y solo con el aprovechamiento de la energía solar.
Como empresa, siempre velamos por una operación respetuosa con el medioambiente, lo que garantiza la sostenibilidad del salar durante muchos años. En este sentido, implementamos las herramientas más avanzadas que existen en la industria.
Como parte de la evaluación de nuestro proyecto de expansión, desarrollamos un modelo hidrogeológico avanzado para garantizar la sostenibilidad y el equilibrio de este ecosistema. Con la presentación de este modelo hidrogeológico, establecemos un nuevo estándar para el uso sostenible del salar de Atacama, que es la herramienta más actual que existe, que sirve como base para autoridades, comunidades y otras empresas con operaciones en la zona.
Uso de agua dulce
Nuestro proceso de producción de litio en el salar de Atacama prácticamente no emplea agua dulce. Albemarle cuenta con derechos de agua dulce otorgados por 23,5 L/s, lo que equivale al 0,46 % de los derechos autorizados en la cuenca del salar de Atacama. De estos, emplea menos de la mitad.
El litio se produce a partir de salmuera, que históricamente no ha tenido y no tiene un uso alternativo para el consumo humano ni la agricultura dada su alta concentración de sales y minerales. La salmuera es diez veces más salada que el agua de mar.
Esta se extrae del núcleo del salar, cuya cuenca es endorreica, es decir, agua dulce de lluvia y nueve escorrentías desde las montañas hacia las zonas bajas, sin que existan cauces superficiales desde otras cuencas ni salgan hacia otras.