Albemarle se preocupa por las comunidades de todo el mundo 

17 de diciembre de 2024

En aulas, despensas de alimentos, refugios, parques y más, los empleados de Albemarle han apoyado a los vecinos necesitados con donaciones de tiempo, recursos y experiencia a lo largo del año. 

“Albemarle se compromete con las comunidades donde operamos y realmente encarna nuestro valor de cuidado”, dijo Dave McDonald, director de la Fundación Albemarle. “Ya sea a través de donaciones corporativas, eventos de equipo o personas que ven una necesidad y la satisfacen, estamos orgullosos de demostrar nuestro compromiso con los vecinos”. 

Ha sido un año lleno de oportunidades para demostrar nuestros valores dentro y fuera de nuestros lugares de trabajo. Aquí hay algunos ejemplos de cómo Albemarle y sus empleados invierten en comunidades de todo el mundo: 

Albemarle recibió el Volunteer Employer Recognition Award 2024 (VERA) del Departamento de Bomberos y Servicios de Emergencia del Gobierno de Australia Occidental (DFES). Este premio reconoce el importante rol que desempeñan los empleadores y los voluntarios autónomos en la prestación de servicios de emergencia en Australia Occidental, donde más del 95 % del personal de servicios de emergencia son voluntarios. 

Albemarle fue reconocida por apoyar a los empleados que se ofrecen como voluntarios para servicios de emergencia al ofrecerles un entorno laboral flexible. Esta flexibilidad permite a los voluntarios tomarse un tiempo libre del trabajo para responder a incidentes críticos de emergencia y participar en capacitaciones esenciales. 

El equipo de Albemarle en Australia Occidental lanzó su programa de voluntariado corporativo, los empleados contribuyen 320 horas en 2024 para beneficiar a la comunidad. 

Los equipos apoyaron a 27 organizaciones comunitarias a través de su Programa de Subvenciones Comunitarias 2024. Entre los beneficiarios están The Leshenault Men's Shed, que usará la subvención para capacitación en primeros auxilios y primeros auxilios en salud mental, y el Club de Atletismo Regional de Bunbury, que comprará cubiertas para fosas de arena para proteger sus cajones de salto en largo. 

En la región del Salar de Atacama, Albemarle contribuyó a varios proyectos comunitarios para apoyar la preservación de la cultura local y brindar recursos para infraestructura, vivienda y educación. 

Uno de esos esfuerzos es la restauración de casas en Catarpe, donde muchas construcciones tienen más de 150 años, hechas en adobe, piedra y barro, con techos de vigas de chañar, cubiertos con brea y paja. Albemarle contribuyó a un proyecto que identificó siete casas para restaurar y reparar, lo que mantuvo su carácter esencial. 

Además, con el apoyo de Albemarle, la comunidad de Machuca inauguró una extensión de la planta fotovoltaica, una instalación sostenible diseñada para proporcionar electricidad estable y confiable. Se proyecta que la planta podrá satisfacer las necesidades energéticas de la comunidad y también podrá mejorar los servicios a los turistas que visitan el área, lo que promueve el desarrollo económico y social de la comunidad.  

“Lo mejor de todo es que la planta servirá como un recurso limpio para la comunidad, lo que promueve la importancia de las energías renovables y la protección del medio ambiente” dijo Manuel Zamora, gerente de relaciones comunitarias de Albemarle.

En colaboración con organizaciones educativas, nuestros empleados organizaron jornadas de inmersión laboral para estudiantes en Sichuan y Shanghái, y una jornada especial de exploración de carreras en Jiangxia Estos eventos ayudaron a los estudiantes a comprender mejor la industria de los minerales, la manufactura y el reciclaje.  

Albemarle Jiangxi también realizó una donación a la Estación de Rescate Bo'ai de la Sociedad de la Cruz Roja y a las comunidades aledañas en el condado de Fenyi, ciudad de Xinyu, provincia de Jiangxi.  

Los colegas de Budapest prepararon 100 sándwiches para el Centro Metodológico de Política Social y sus Instituciones de Budapest (BMSZKI), el mayor proveedor de servicios para personas sin hogar de Budapest. Voluntarios entusiastas llevaron los sándwiches al centro de distribución en trolebús, lo que demuestra el compromiso y la creatividad para asegurarse de que los sándwiches llegaran a su destino. El equipo de servicio en la calle de BMSZKI desempeñó un rol crucial en el esfuerzo, distribuyendo sándwiches a los vecinos sin hogar.  

A principios de este año, los empleados de Budapest dedicaron un día a ser voluntarios en un refugio local para perros, donde pintaron cercas y limpiaron escombros para un área de recreo para perros. 

Albemarle hizo una donación a la iniciativa anual “Uniforms for Kids” de la Sociedad de San Vicente de Paúl en Baton Rouge, Luisiana, para ayudar a los estudiantes a prepararse para un nuevo año académico. Los empleados de varios sitios donaron útiles escolares para los estudiantes de sus comunidades.  

En Magnolia, Arkansas, Albemarle patrocinó una fiesta de regreso a clases para estudiantes, que incluyó cortes de pelo y útiles escolares gratuitos, y nuestro equipo participó en el evento comunitario de la escuela secundaria Magnolia. 

En octubre, Albemarle y sus empleados trabajaron para ayudar a las personas que sufrieron daños devastadores por el huracán Helene en el oeste de Carolina del Norte. Con campañas de donación de alimentos, donaciones en dinero y esfuerzos voluntarios, marcamos la diferencia en Kings Mountain y otras comunidades que se están reconstruyendo después de pérdidas significativas.  

Y en solo algunos ejemplos de donaciones navideñas, los equipos de Albemarle de todo el país armaron kits educativos para Digi-Bridge, una organización que tiene como objetivo garantizar que los estudiantes de comunidades subrepresentadas tengan acceso, oportunidades y habilidades para tener éxito en un mundo que cambia rápidamente. 

En Charlotte, los grupos de empleados Women Connect NC y Latinx Connect se ofrecieron como voluntarios en el Centro Navideño del Ejército de Salvación, organizando bolsas de regalos y reabasteciendo los estantes donde las familias pueden elegir regalos navideños para los niños. 

El equipo de comunicaciones corporativas y asuntos externos de Charlotte se ofreció como voluntario en Nourish Up, la red más grande de bancos de alimentos en Carolina del Norte. El grupo clasificó las donaciones y empacó las cajas que se distribuirán a las personas en todo el condado de Mecklenburg, donde se encuentra la sede de Albemarle. 

“Contribuir a la comunidad donde vivimos y trabajamos es una forma muy significativa de conectarnos como equipo”, dijo Colleen Penhall, vicepresidenta de comunicaciones empresariales.  “También da vida a nuestro valor central de cuidado: ayudar a las personas nuestra área local que más lo necesitan.”